Salir de acampada es una experiencia que todos deberíamos de vivir al menos una vez en la vida, es algo maravilloso, da igual si te gusta la naturaleza o no, da igual si no te gustan los bichos o si sabes que no vas a pegar ojo en toda la noche, odias dormir en el suelo y probablemente la espalda te matará el día siguiente, aun con todos estos inconvenientes todos deberíamos de vivir esa experiencia.
Las acampadas familiares marcan un antes y un después en la vida de todo niño y adolescente.
Marco una diferencia en mi vida, fue una experiencia maravillosa que compartí con mi padre y que no olvidaré jamás. Yo tenía como trece años y nos fuimos a acampar a la orilla de un rio que hay en un paraje natural cerca de mi pueblo, un lugar muy bonito y cuidad que sirve como reserva para algunos animales autóctonos de la zona.
Mi padre preparó un par de bolsos para la ocasión con todo lo que íbamos a necesitar, mi madre le ayudó por supuesto. No olvidó detalle, de hecho creo que teníamos más cosas que si nos hubiéramos quedado en casa. El fin de semana fue fantástico, pescamos, paseamos, subimos montañas, dormimos al raso y hablamos durante horas.
La vuelta fue la que nos marcó ya que sufrimos un pequeño accidente de regreso a casa, una rueda se reventó y nos salimos de la carretera con el consiguiente susto, ya podéis imaginar.
Mi padre no estaba preparado para eso, entonces saque mi teléfono móvil y puse en el navegador http://www.buscardesguaces.es/, nos enviaron una grúa y nos ayudaron en todo lo que necesitamos. Da gusto poder contar con un buscador así, puedes encontrar en unos minutos la ayuda necesaria para cada momento y eso es de agradecer.
Si vas a salir de acampada con tus familiares, si has decidido pasar un fin de semana con los tuyos en plena naturaleza, asegúrate de que vas bien preparado, ten en cuenta cualquier altercado que pueda acontecer, ten por seguro que si algo puede pasar mal, pasará, y se precavido en cuanto al coche, no salgas sin rueda de repuesto y con todo en orden. Disfruta de la naturaleza y de los tuyos descansando y pasando unos días de relax, estos días son los que se atesoran en la memoria y son los más recordados cuando somos mayores.